El verano siempre conlleva muchos gastos, ya sea porque has podido disfrutar de unos días en la playa o la montaña o porque has estado haciendo uso del aire acondicionado para combatir las altas temperaturas. Por eso, ahora que nos encontramos en la recta final de este periodo estival, es el mejor momento para poner a punto las finanzas de tu hogar para tratar de reponer la cuenta del banco.
Una manera muy sencilla de comenzar a ahorrar unos cuantos euros, que además no te llevará mucho tiempo ni esfuerzo, es revisar las facturas de tus suministros habituales, como lo son la electricidad, el servicio de Internet o el gas entre otros. De hecho, es aconsejable hacerlo periódicamente, pues en ocasiones se acaban las ofertas y descuentos de los que gozabas sin darte cuenta, o las tarifas cambian subiendo el importe de tus facturas.
En este artículo te contamos cómo a través de estas comprobaciones tu hogar puede ahorrar mucho dinero durante meses.
La importancia de revisar de manera habitual las facturas
No es necesario que seas un experto jurista para entender las facturas que te llegan a casa, ya sean en formato electrónico o en papel. Estos documentos suelen ser lo suficientemente claros, con desglose de conceptos y explicaciones, para que puedas saber qué tipo de contrato tienes, cuál es tu consumo y por qué tienes que pagar la cantidad total indicada.
No obstante, en ocasiones las empresas de suministros pueden cometer errores, como incluir servicios no solicitados, exigir cuotas por una cantidad diferente a la acordada, cobrar dos veces el mismo periodo de tiempo, etc. Para poder percatarte de esta clase de errores, es fundamental que revises con atención las facturas de todos los suministros que tengas contratados.
Estar al día con las facturas y conservar las últimas es importante para hacer comparaciones, pero también para poder ejercer tus derechos y realizar las reclamaciones pertinentes frente a las compañías pertinentes o incluso frente a la OCU.
Cómo ahorrar en las distintas facturas de suministros
Aunque cada hogar es único, lo más normal es que todos los domicilios tengan contratados servicios de telefonía e Internet, de electricidad, de gas y de agua, por lo que nos centraremos en cómo ahorrar en las facturas de estos suministros.
Ahorra en la factura de la luz
En los últimos años el encarecimiento de la electricidad ha hecho que todos temamos el momento de comprobar la factura de la luz. Para evitar recibir facturas desorbitadas, deberías prestar atención a los siguientes conceptos:
- Tipo de contrato: comprueba si tienes un contrato por el que el precio de la luz es igual todo el día o si tienes tarifas específicas para las distintas franjas horarias del día. Las compañías ofrecen distintas ofertas que se pueden adaptar a tus necesidades.
- Potencia: la factura de la luz se divide en la potencia contratada y el uso, mientras que puedes intentar ahorrar haciendo un uso eficiente de la luz, el coste de la potencia contratada siempre es el mismo, revisa que se ajusta a lo que necesitas realmente.
- Comparadores: utilizar un comparador de tarifas de luz como menosdeluz.com puede ayudarte a ahorrar mucho tiempo. Según este comparador de luz, el 80% de los usuarios han obtenido un ahorro medio del 30%.
Ahorra en la factura de teléfono/Internet
Cada día puedes ver las ofertas de telefonía e Internet que las compañías anuncian en la televisión, en las redes sociales e incluso mediante llamadas telefónicas, por lo que ya sabes que existen contratos de todo tipo. Para poder ahorrar en tu factura, fíjate en lo siguiente:
- Tarifa adecuada: dada la gran oferta de tarifas y compañías que hay en el sector, puede resultar abrumador encontrar el servicio de telefonía más adecuado, pero merece la pena invertir algo de tiempo en comparar qué ofrece cada empresa.
- Contrata paquetes: por lo general, las compañías telefónicas ofrecen paquetes de móvil+Internet, pero también incluyen más servicios como teléfono fijo o servicios de televisión. Este tipo de paquetes son más rentables que contratarlo todo por separado.
- Uso real: a pesar de lo atractivo que resulten los paquetes, contrata lo que de verdad vayas a utilizar. Por ejemplo, si siempre ves Netflix ¿para qué quieres cientos de canales que no vas a usar? O si llamas mucho, te interesará contratar tarifas ilimitadas.
Ahorra en la factura del gas
Si no tienes caldera comunitaria, utilizas un depósito de gasoil o tu instalación es eléctrica, este punto no es para ti, pero para todos aquellos que tienen una instalación de gas natural en sus hogares harían bien en leer con atención para ahorrar, sobre todo de cara al invierno.
- Busca la mejor oferta: al igual que en el resto de los suministros, la principal fuente de ahorro en factura es contratar la tarifa más barata que te proporcione el servicio que realmente necesitas.
- Uso eficiente: nada mejor para ahorrar que ser cuidadoso con el uso del gas. Ducharte en lugar de bañarte, abrigarte para no tener que encender la calefacción o aislar bien tu domicilio te ayudará a disminuir la factura del gas.
- Regula el termostato: si bajas unos grados tu termostato o calefacción, estos sistemas no necesitarán utilizar tanto gas para funcionar, por lo que el gasto también será menor. No te preocupes porque el cambio de la temperatura será casi imperceptible.
Ahorra en la factura del agua
Es posible que si vives en un edificio, el coste del agua esté incluido en la cuota de comunidad que pagas, pero si no es así, también podrás ahorrar una buena cantidad de dinero en esta factura. Atento a los siguientes elementos:
- Ahorra agua: una manera infalible de reducir el gasto de la factura de agua es no desperdiciándola, lo cual además también es beneficioso para el medio ambiente. En Internet puedes encontrar trucos que te ayudarán a hacerlo.
- Tarifa indicada: existen diferentes empresas que se dedican al suministro de agua a los particulares, así que puedes analizar sus diferentes ofertas para encontrar la tarifa más asequible para tu hogar.
- Repara las fugas: por muy pequeña que sea una fuga, la pérdida de agua constante puede engrosar cualquier factura del agua. Lo mismo ocurre si tienes grifos que gotean. Reparar este tipo de problema rápidamente supone un gran ahorro.
Siguiendo los consejos que te hemos contado podrás poner tus finanzas a punto en muy poco tiempo y prepararte para encarar el otoño y el invierno con facturas más reducidas.