El piloto colombiano, de 18 años, líder actual del Mundial de Motociclismo Moto 3, por decisión de su equipo, el CFMoto Aspar Team, con el cual viene compitiendo desde los 11 años, ascenderá, en el 2025 a la categoría Moto 2. Este es un importante paso hacia su objetivo de ser parte de la grilla del MotoGP, la máxima categoría del motociclismo del mundo.
Por Juan Carlos Salgado
Periodista especializado en deportes de motor.
Simplemente hubiera podido ser un nuevo Alonso. No habría sonado extraño, si en los titulares de prensa apareciera su nombre, David, para engrosar la innumerable lista de figuras del deporte español y como complemento se dijera que estaba destinado para triunfar en el apasionante mundo de los motores, pero esta vez no en cuatro ruedas, sino en dos. Para nada habría sido extraño ver en lo más alto del podio la bandera española en el Moto3, en esa categoría, en la que piden pista quienes sueñan con llegar al MotoGP (la máxima categoría), ni mucho menos escuchar el himno de la llamada ‘Madre Patria’ en Gran Bretaña, Cataluña, San Marino y Tailandia, que le significó ser tercero en la clasificación general y el novato del año con el equipo Aspar Team.
Pero, para fortuna del motociclismo colombiano no fue así, y el protagonismo fue para la bandera tricolor y para el “oh gloria inmarcesible” y el “oh júbilo inmortal. Y la razón, simple, pues este joven (Red Bull) que vio la luz el 25 de abril de 2006 (17 años), en Madrid, España, no solamente quiere ser reconocido como David Alonso, sino como David Alonso Gómez, el hijo de Agustín Alonso (español) y de Sandra Marcela Gómez, de los Gómez de Medellín, y como el piloto que lleva en su corazón la bandera colombiana.
Si bien las zetas y el seseo lo delatan, uno que otro ‘parce’ entreverado y el deseo de rendirle un homenaje a su progenitora terminaron por inclinar la balanza hacia estas tierras, que disfruta visitar y de las cuales se siente orgulloso, porque él es de esos que cree firmemente que la sangre no se niega.
Claro, también heredó de su padre, su principal mentor, el amor por las motocicletas, y él se emociona, cual más, con cada una de sus gestas, como lo hizo cuando le regaló a su vástago la primera máquina, cuando apenas tenía cinco años, quizás con el interés, sin comunicarlo a nadie, de que su pequeñín se convirtiera en figura.
Y fue una década después, cuando ese sueño se comenzó a cristalizar, pues David Alonso Gómez se consagró en 2021, en plena adolescencia (15 años), como el campeón del Red Bull MotoGP Rookies, en la que se empiezan a vislumbrar las nuevas estrellas que brillarán en el firmamento del MotoGP (antes se había llevado los títulos del de 85GP, en 2018, del Campeonato de España, y el de la European Talent Cup, en 2020). Y él lo hizo con luz propia, obteniendo sendas victorias en Portugal (dos oportunidades), Alemania y Austria (en tres), superando con creces al español Daniel Holgado y tomando el trono del también ibérico Pedro Acosta.
El brillante 2023
Pero fue el año pasado el que le tenía reservado a los Alonso Gómez muchas alegrías. Primero, porque se daba su primera temporada completa en el Moto3, a la que llegó con ilusiones de hacer una buena temporada, pero quizás sin imaginarse todo lo que le esperaba: cuatro victorias, ocho podios y tercero en la clasificación general, resultados que lo dejan como uno de los máximos candidatos para esta temporada y como uno de los llamados a llenar uno de los cupos privilegiados del MotoGP, en 2025.
David Alonso, su familia y equipo tienen la certeza que la decisión de llevar la bandera colombiana ha sido acertada, y sus ojos se iluminan al recordar cada uno de los instantes en los que escuchó el himno colombiano en lo más alto del podio: “han sido momentos especiales. Es un himno muy bonito y alegre y escucharlo me llena de emoción”, ha dicho en contadas entrevistas, cuando se le pregunta sobre el hecho de portar la nacionalidad colombiana.
En su página personal se presenta como un motociclista de doble nacionalidad que “día a día intento ser mejor piloto, pero también mejor persona, y trabajaré al máximo con diligencia, ilusión y dedicación, para poder dar lo mejor en la próxima temporada”. Y cuando se tiene que definir como piloto es claro y contundente: “Soy un piloto muy regular en mi rendimiento, soy de los motociclistas que piensa y toma buenas decisiones en la pista, agresivo y sin complejos, cuando se trata de realizar sobrepasos en la pista”.
Es David Alonso Gómez, el colombiano que lleva con orgullo la bandera de Colombia en Moto GP y el que como su ídolo, Marc Márquez, puede estar destinado para ser historia en el motociclismo mundial y seguir entonando con orgullo “oh gloria inmarcesible, oh júbilo inmortal”, como aquel 6 de agosto de 2023, cuando partiendo desde la última posición hizo una carrera magistral, cruzando la línea de meta como victorioso, diciendo a su manera, “aquí estoy yo parceros”…