El futuro de Intel sigue tomando forma, y aunque aún no se ha lanzado oficialmente Arrow Lake con los Core Ultra 200, ya se están filtrando detalles sobre lo que vendrá en los próximos años. Entre las grandes revelaciones está la arquitectura Razer Lake-S, que llegará en 2027 para los Intel Core Ultra 500. Aunque todavía sabemos poco sobre esta arquitectura, ya está generando expectativas importantes, especialmente luego de todo lo sucedido recientemente.
Reestructuración interna y cancelaciones: Un panorama inestable para Intel
En los últimos años, Intel ha pasado por importantes reestructuraciones internas que han afectado a sus planes de lanzamiento. Uno de los cambios más relevantes ha sido la cancelación del refresh de Arrow Lake-S, lo que ha dejado al panorama de las arquitecturas de CPU en una situación incierta hasta la llegada de los 2 nm en TSMC y el Intel 18A. Este retraso en la innovación podría dar lugar a una pausa en la evolución de las CPUs de Intel hasta que estas nuevas tecnologías entren en producción.
Sin embargo, mientras se cancelan algunas arquitecturas como Beast Lake, surgen nuevas propuestas como Razer Lake-S, que se posiciona como el próximo gran paso de Intel en 2027. Esta arquitectura, aunque aún en fases tempranas de desarrollo, podría ser la sucesora de Nova Lake-S, prevista para 2026, y podría marcar una revolución en la forma en que Intel implementa la caché vertical y otras tecnologías avanzadas en sus chips.
Cronología de las futuras arquitecturas de Intel
Para entender mejor la evolución de Intel, es necesario analizar el cronograma de arquitecturas que la compañía tiene planeado para los próximos años:
- Arrow Lake-S -> Core Ultra 200 (2024)
- Panther Lake -> Core Ultra 300 (2025)
- Nova Lake-S -> Core Ultra 400 (2026)
- Razer Lake-S -> Core Ultra 500 (2027)
Este cronograma revela una hoja de ruta que busca consolidar a Intel en el mercado de CPUs tanto para portátiles como para escritorio, con Razer Lake-S como la gran apuesta para el año 2027. Aunque Panther Lake es todavía una incógnita para el 2025, la verdadera transformación parece comenzar con Nova Lake-S en 2026, que introducirá nuevas tecnologías como la caché vertical.
Nuevos sockets y tecnologías avanzadas: ¿Un cambio de paradigma para 2027?
Uno de los grandes interrogantes sobre Razer Lake-S es si compartirá el mismo socket que Nova Lake-S o si introducirá un nuevo socket. Intel tiende a cambiar de socket cada dos generaciones, lo que hace probable que tanto Nova Lake-S como Razer Lake-S tengan un nuevo socket más avanzado que el LGA1851.
Una de las características más destacadas que se espera de Nova Lake-S es la inclusión de caché vertical con la tecnología Foveros 3D, similar a lo que AMD ha hecho con su V-Cache en los procesadores Ryzen. Esta tecnología permitirá un rendimiento mayor en tareas que dependen de una gran cantidad de memoria caché, como juegos y aplicaciones profesionales.
Razer Lake-S también seguiría este camino, pero con un enfoque más avanzado para 2027, probablemente con su versión 3D V-Cache llegando en 2028, lo que proporcionaría un rendimiento aún mayor y establecería un nuevo estándar para el mercado de CPUs de gama alta.
El impacto de la nueva caché y la tecnología Foveros 3D
La inclusión de la caché vertical y la tecnología Foveros 3D podría ser el diferenciador clave para Intel en los próximos años. Esta tecnología permite apilar capas de caché sobre el procesador, mejorando enormemente el acceso a la memoria y reduciendo la latencia. AMD ya ha implementado una versión de esta tecnología en sus procesadores, y parece que Intel está listo para seguir el mismo camino, pero con un enfoque más avanzado y con mayor integración en su arquitectura.
Razer Lake-S será crucial para evaluar cómo Intel implementa estas mejoras tecnológicas, y si logra aprovecharlas para competir de manera más efectiva con AMD, que ha sido líder en este ámbito con su V-Cache.
Un futuro incierto pero prometedor para Intel con Razer Lake-S
Aunque aún queda mucho por conocer sobre Razer Lake-S, la arquitectura de los Intel Core Ultra 500 promete ser un logro importante en la evolución de las CPUs de la compañía. Las reestructuraciones internas y las cancelaciones de productos como Arrow Lake-S Refresh han dejado claro que Intel está ajustando su estrategia, probablemente para enfocarse en arquitecturas más avanzadas como Nova Lake-S y Razer Lake-S.
El uso de tecnologías como Foveros 3D y la caché vertical marcará una nueva era en el rendimiento de las CPUs, y si Intel logra implementarlas de manera efectiva, podría cerrar la brecha con AMD y sus procesadores Ryzen con V-Cache.
Fuente: Tom’s Hardware