El concepto de las casas diminutas ha captado la atención de personas interesadas en estilos de vida sostenibles y minimalistas. Sin embargo, el diseño de Levi Kelly lleva esta tendencia a un nivel extremo al presentar lo que él describe como la casa diminuta más pequeña del mundo, con tan solo 1,8 metros cuadrados. Montada sobre un remolque de un solo eje, esta casa en miniatura es una muestra de la creatividad en la gestión del espacio, integrando elementos esenciales para una vida minimalista en un espacio ultra compacto.
Diseño exterior y estructura
La estructura exterior de esta microvivienda está construida con un armazón de madera y revestida con paneles de cedro pintado, combinados con tejas en el techo. El uso de cedro no solo aporta una estética natural y atractiva, sino que también ofrece una durabilidad y resistencia notables. Además, la vivienda cuenta con gatos estabilizadores que la mantienen firme cuando está estacionada, brindando una experiencia segura y confortable a sus habitantes.
Interior: espacio optimizado al máximo
Área de descanso y almacenamiento
El interior de esta casa diminuta consiste en una única habitación, donde cada centímetro está diseñado con precisión para maximizar la funcionalidad. Al ingresar, se encuentra una banca que puede acomodar a tres personas, con compartimentos de almacenamiento integrados. Este diseño no solo proporciona un espacio para sentarse, sino que también resuelve el problema del almacenamiento en un área tan reducida.
Bajo el asiento, hay una unidad de aire acondicionado que ofrece calefacción y enfriamiento, lo cual permite que la vivienda sea habitable en diversas condiciones climáticas. Esta solución integrada es ideal para personas que desean reducir su impacto ambiental, ya que el uso de un sistema de climatización compacto y eficiente ayuda a minimizar el consumo energético.
Cocina compacta pero funcional
La cocina de la casa es sencilla pero eficiente. Incluye un sistema de tanques de agua para el agua limpia y el agua gris, un filtro y una bomba para garantizar que el agua esté disponible cuando se necesite. Además, cuenta con un calentador de agua, una mini-nevera para almacenar alimentos y bebidas en pequeñas cantidades, y una placa de inducción que se guarda en un cajón cuando no se está usando, optimizando así el espacio.
El fregadero de la cocina tiene un grifo plegable y una tabla de cortar que puede colocarse sobre el fregadero para utilizarse como una encimera adicional. Esta solución de diseño mejora significativamente la funcionalidad en un espacio tan limitado, permitiendo preparar comidas de forma práctica sin renunciar al confort.
Dormitorio compacto y creativo
El área de descanso también ha sido diseñada con ingenio. La cama es plegable y se guarda en el techo cuando no está en uso, lo que permite aprovechar el espacio del suelo durante el día. Para acceder a la cama, la persona debe subirse al mostrador de la cocina, una solución algo poco convencional, pero que maximiza el espacio y mantiene la simplicidad.
Comodidades exteriores
En cuanto al baño, se han tomado decisiones de diseño que permiten mantener el interior exclusivamente para las áreas esenciales. La ducha exterior está instalada en la pared frontal cerca de la entrada, y un pequeño inodoro portátil, estilo de camping, se guarda en una caja trasera. Este inodoro se puede trasladar al interior para brindar mayor privacidad, pero su ubicación principal es exterior, lo que subraya el carácter minimalista de esta vivienda.
Energía y autosuficiencia
Para quienes buscan un estilo de vida más sostenible, la casa cuenta con dos paneles solares montados en el techo. Estos paneles alimentan una batería que suministra energía durante la noche, promoviendo el uso de energías renovables. También se ofrece la opción de conectar la vivienda a una fuente de energía convencional mediante un conector tipo RV, lo cual proporciona flexibilidad según las necesidades del usuario y las condiciones del entorno.
Coste accesible y construcción autosuficiente
Uno de los aspectos más sorprendentes de esta casa diminuta es su costo. Kelly logró construirla con un presupuesto de tan solo 5.000 dólares (aproximadamente 4.700 euros). Parte de esta reducción en los costos se debe a que ya contaba con el remolque, y al hecho de que él mismo se encargó de la construcción. Esto destaca la viabilidad de los proyectos de autoconstrucción y el potencial de ahorro que ofrecen, permitiendo que más personas puedan acceder a una vivienda funcional sin necesidad de una gran inversión.
Esta casa diminuta representa una visión moderna y radical del minimalismo en la vivienda, ideal para personas comprometidas con la sostenibilidad, el ahorro energético y la reducción de su huella ecológica. Aunque no es para todos, esta innovadora propuesta subraya el potencial de la arquitectura minimalista para ofrecer soluciones de vivienda accesibles y respetuosas con el medio ambiente, sin renunciar a las comodidades básicas.
Vía levimkelly.com