Ubisoft enfrenta una gran crisis luego de una serie de problemas que van desde lanzamientos fallidos hasta demandas. En los últimos años, la compañía ha tenido dificultades para lanzar títulos con éxito duradero, lo cual ha impactado en sus ventas y ha generado desconfianza en sus seguidores. Recientemente, su lanzamiento de Prince of Persia: The Lost Crown no cumplió con las expectativas comerciales y llevó al cierre del estudio desarrollador. A esto se suma el fracaso de Star Wars Outlaws, que causó el retraso de uno de sus proyectos más anticipados, Assassin’s Creed Shadows.
Además de los problemas de ventas, Ubisoft enfrenta una demanda debido al cierre de los servidores de The Crew, un título lanzado en 2014 y cuya vida online terminó en marzo de 2024 por temas de licencia. Quienes demandan adquirieron el juego en 2018 y 2020, y afirman que el cierre ha dejado el juego en una condición completamente injugable al no contar con un modo offline. La compañía ofreció reembolsos para quienes compraron el juego recientemente, pero la mayoría de los usuarios, especialmente los que lo poseen desde hace años, no obtuvieron nada.
Ubisoft es demandada.
Esta demanda colectiva podría ser importante si más jugadores se unen, ya que, según los abogados, el cierre de los servidores y la pérdida de acceso al juego violan las leyes de protección al consumidor de California (en donde se realiza la demanda).
Ubisoft parece estar en un momento crítico, pues cada nuevo problema o conflicto legal alimenta la frustración de los jugadores y las demandas de algunos fanáticos por un cambio radical en la empresa. Con la atención ahora en el futuro de Assassin’s Creed Shadows, cualquier fracaso en este proyecto podría empeorar la situación de Ubisoft, en un momento en el que la confianza de los jugadores está en su punto más bajo.
Fuente: Polygon