La decisión de TSMC de aumentar hasta en un 30% el precio de sus chips de 3 nm y 4 nm fabricados en EE.UU. no sorprende a nadie. Lo que sí ha sorprendido es la reacción del sector, nadie se ha quejado… Empresas como AMD, Apple, NVIDIA o Broadcom parecen más que dispuestas a pagar el nuevo precio. ¿Por qué? Porque fabricar en EE.UU. es ahora una jugada geoestratégica, no solo económica.
Desde la guerra comercial iniciada por el presidente Trump, fabricar fuera de China se ha vuelto una prioridad para muchas empresas. Y eso tiene un precio, como costos laborales más altos, infraestructura aún en desarrollo (como la planta de TSMC en Arizona) y menos eficiencia productiva que en Taiwán. El resultado es claro, si quieres tu chip de última generación hecho en suelo estadounidense, prepárate para pagar un 30% más.
Y no solo eso, la capacidad actual de TSMC en EE.UU. es limitada, ya que solo pueden fabricar apenas entre 20.000 y 30.000 obleas al mes. Pero eso no ha frenado a nadie. La lista de espera crece porque, para estas empresas, producir localmente es la única forma de evitar los aranceles y asegurar un suministro más predecible. Pagar más ahora evita dolores de cabeza después.
TSMC aumentará el precio de sus chips de EE.UU.
Como es habitual en la industria, el aumento de costos no se queda en las grandes tecnológicas, sino que se traslada al consumidor final. Si ya nos parecían caras las CPU y GPU actuales, preparate para lo que viene. Fabricar chips en EE.UU. puede sonar muy patriótico, pero también encarece cada componente en la cadena de suministro. Y eso significa laptops, smartphones, tarjetas gráficas y consolas más caras.
La jugada de TSMC, por más agresiva que parezca, es una forma de equilibrar su inversión en EE.UU. con márgenes sostenibles. Con un margen bruto del 58% y previsiones de crecimiento del 10% en ingresos, el fabricante taiwanés no está dispuesto a perder dinero, ni siquiera en un mercado tan exigente como el estadounidense.
TSMC ya ha dejado claro que el costo de producir en EE.UU. no es discutible. Y con una política comercial cada vez más impredecible, compañías como Intel, AMD y NVIDIA parecen haber decidido que pagar más es mejor que jugar con fuego. Si los aranceles suben, si las relaciones con Taiwán se tensan, o si Trump vuelve a cambiar las reglas del juego, más vale estar preparado.
Fuente: WCCFTech