El obispo Félix Genn recuerda los cinco años de colaboración con el prefecto del Dicasterio para los Obispos. “Conocí su claridad de juicio y un enfoque verdaderamente lleno de amor. Pero ahora, démosle tiempo para crecer en su nueva misión”
Stefanie Stahlhofen y Daniele Piccini – Ciudad del Vaticano
Eso es lo que pide para el Papa León XIV el obispo emérito de Münster, monseñor Félix Genn, quien trabajó cinco años con el entonces cardenal Prevost en el Dicasterio para los Obispos.
Además, el prelado explica que tuvo con el entonces prefecto, durante el período de colaboración en el Dicasterio, “una buena sintonía desde el principio, gracias a su claridad de juicio, competencia, humildad y modestia, y a un enfoque verdaderamente lleno de amor”.
Dos fotos significativas
Dos fotografías impactaron especialmente al obispo emérito de Münster. Y, de hecho, explica:
No estará solo en su misión
Sobre cómo afrontará su misión el Papa León XIV, monseñor Genn sólo puede “imaginarlo por la forma en que se ha mostrado en público hasta ahora. Hemos visto que fue a la Madre del Buen Consejo. Sabemos que confía en la oración y en la fraternidad. Ya ha visitado su comunidad agustiniana y también confía en la colaboración de los cardenales y de todas las personas que están orando por él. Y creo que eso le da un apoyo y una confianza interior al saber que no está solo”.