Gigabyte no se guardó nada y acaba de presentar tres modelos de la nueva GeForce RTX 5050, todos con overclock de fábrica. La estrella del show es la versión Low Profile, pensada para gabinetes compactos sin perder potencia. Cada modelo está orientado a un tipo de usuario.
Tres versiones con facha y buen rendimiento
GeForce RTX 5050 Gaming OC 8G es la más grande del trío. Mide 280 x 117 x 40 mm y utiliza dos slots. Viene con tres ventiladores Hawk Fan que se paran cuando la carga baja, dos heatpipes de cobre y un sistema de refrigeración de alto nivel. Además, trae dos DisplayPort 2.1b y dos HDMI 2.1b, y un conector de 8 pines para alimentación. Es una bestia que no le falta nada y está pensada para setups con espacio y ganas de exprimir FPS.
GeForce RTX 5050 Windforce OC 8G, por su parte, baja un poco el perfil. Mide 199 x 116 x 40 mm y mantiene el formato de doble slot. Usa dos ventiladores y un disipador con contacto de cobre y dos heatpipes. Al igual que la Gaming OC, tiene el mismo set de puertos y alimentación. Es ideal para quien busca rendimiento sin que la tarjeta ocupe la mitad del espacio.
GeForce RTX 5050 Low Profile OC 8G es la gran novedad. Con medidas de 182 x 69 x 36 mm, está diseñada para gabinetes pequeños, pero no por eso se queda corta. Tiene tres ventiladores compactos, un disipador con una sola heatpipe y una plancha de cobre. Lo mejor es que incluye tanto la chapa normal como la low profile, y ofrece un DisplayPort 2.1b, uno 1.4a y dos HDMI 2.1b. También lleva un conector de 8 pines. Esta versión te saca del apuro si tenés un gabinete chico pero querés jugar tranqui a 120fps.
Overclock, buena refrigeración y requisitos de fuente
Las tres placas vienen con overclock de fábrica y usan un nuevo chip GB207, aunque Gigabyte no especificó las frecuencias. Todas usan «termo-gel de nivel servidor» para mejorar la transferencia térmica. Para mover cualquiera de estas RTX 5050 se recomienda una fuente de al menos 550W, algo esperable para una placa de esta gama con OC.
Fuente: Tom’s Hardware
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